martes, 22 de septiembre de 2009

Apunte polemológico

"La libre voluntad, la cultura, el entusiasmo, la embriaguez del desprecio a la muerte, ninguna de estas cosas es suficiente para vencer la fuerza de gravedad de los pocos centenares de metros donde impera la magia de la muerte mecánica.

Lo que de aquí resulta es la estampa única, verdaderamente fantasmal, de un morir en el espacio de la Idea pura, la estampa de un hundimiento en el que, como en un mal sueño, ni siquiera el esfuerzo absoluto de la voluntad logra domeñar una resistencia demoniaca. (...)" (p. 107)

"La fuerza de combate de la persona singular no es un valor individual, sino un valor funcional, los hombres ya no caen luchando, sino que sufren una avería y quedan fuera de servicio." (p. 108)

"Es preciso subrayar que estos portadores de una fuerza nueva de combate no se hacen visibles hasta las fases tardías de la guerra y que su modo propio y diferente de ser, su alteridad, resalta en la misma medida en que va disgregándose la masa de los ejercitos formados según los principios imperantes en el siglo (...) (p. 109)

Ernst Jünger, El Trabajador. Dominio y figura.

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