Nadie puede dudar de la certeza y precisión de una ecuación físico matemática, es una manera de fijar lo real, operación que sutura enteramente al sujeto, aquello no comprende ninguna subjetividad. Se trata de una forma de callar un real, el mundo físico una vez que c0mience a ser parte de un enunciado científico no hablará jamás. Este es el ideal de la ciencia moderna, encerrar a su objeto en una letra, una fórmula, que se remite no más que a sí misma y no hablamos de objetividad sino de objetivación. Dice Gérard Pommier, psicoanalista francés, "nada fascina tanto al sujeto como la escritura de una ecuación matemática: él sabe bien que está al fin por completo ausente en esa serie de signos". Es decir, no sólo en este movimiento se logra atrapar la realidad con la letra y el número sino que al mismo tiempo el sujeto "aparece" ausente, objetivación de la subjetividad.
No ocurre lo mismo en ciencias como la geografía o la sociología, los conceptos que se utilizan en estos campos se definen unos respecto de otros y se mantienen en el orden del significante, donde siempre estará presente un sujeto, tan neutro como se lo pretenda.
Pero qué ocurre a nivel del individuo? El problema se presenta cuando éste se identifica con el lenguaje perdiéndose en él como un objeto. Dirá J. Lacan respecto de sus pacientes, "nosotros tenemos que vérnoslas con esclavos que creen ser amos y que encuentran en un lenguaje de misión universal el sostén de su servidumbre con las ligas de su ambigüedad".
Por un lado, es imposible que el hombre realice su entrada al mundo social por fuera del orden simbólico, el Otro le dará una lengua, un nombre y todas las reglas que lo gobernarán, pero por otro lado, deberá buscar la forma de abandonar la fascinación ante los amos e ideales propuestos por nuestra sociedad.
Inscríbete en una metáfora, inventa una palabra, rompe el código!!
No ocurre lo mismo en ciencias como la geografía o la sociología, los conceptos que se utilizan en estos campos se definen unos respecto de otros y se mantienen en el orden del significante, donde siempre estará presente un sujeto, tan neutro como se lo pretenda.
Pero qué ocurre a nivel del individuo? El problema se presenta cuando éste se identifica con el lenguaje perdiéndose en él como un objeto. Dirá J. Lacan respecto de sus pacientes, "nosotros tenemos que vérnoslas con esclavos que creen ser amos y que encuentran en un lenguaje de misión universal el sostén de su servidumbre con las ligas de su ambigüedad".
Por un lado, es imposible que el hombre realice su entrada al mundo social por fuera del orden simbólico, el Otro le dará una lengua, un nombre y todas las reglas que lo gobernarán, pero por otro lado, deberá buscar la forma de abandonar la fascinación ante los amos e ideales propuestos por nuestra sociedad.
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3 comentarios:
¿es el Tiempo la condición de posibilidad del Tiempo?
perdón, ¿es el Otro la condición de posibilidad del Tiempo?
Respecto de la pregunta referida al tiempo y el Otro, existe esta relación: prescindiendo del tiempo los significantes se encuentran todos en el mismo instante en el Otro, lo cual puede advenir cualquier significante, entonces estaríamos en el nivel de la metáfora, y por otro lado con la cadena signifante en una diacronía, se despliegan los significantes uno detrás de otro, esta función Lacan la llama metonimia. Espero haber respondido, de todas maneras es muy importante conocer las dos funciones significantes, aunque un tanto difíciles de explicar, con ellas se produce el "sentido" y no la simple reproducción del código lingüístico (Otro).
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