La visión deformada de los espejos
la calle inclinada sobre los rostros envenenados por el esfuerzo del día
porque los días modernos copiados del modelo de los deportes
compiten entre sí por una diferencia de segundos
el agotamiento de la visión en objetivos sin respuesta
porque la realidad de las mareas desguaza los castillos de arena de los
[deseos y las banderas de la ilusióny los deseos ensimismados sólo encuentran esquinas de conversaciones
y la vida detrás de los espejos invierte la palabra en una burla[gastadas
[incomprensible
la tundra sedienta de miles de almas dejadas para más tardetransforman en asfalto y cenizas bajo el rodillo de toneladas de las
[máquinas los brotes inquietos del sombrero de los sueños
y las palabras esclavizadas rumbo al sur en las patrullas a la caza de los[barcos de piratas reconstruyen máquinas sutiles
porque las torturas que viven en los armarios
los estadios donde los muertos gritadores no cerraron nunca los ojos
las fotografías insolentes vueltas del revés
las razones mediocres de las academias de policía
y tantas cosas que dibujan la arquitectura secreta de las ciudades
viven como fantasmas en las canciones de los locos o en los cementerios
[de gafas de sol.
La ciudad en primavera abierta como un higo blanco
vive ofrecida al extraño con una dulzura de sangre
la piel erizada se resiste al placer a entregarse
la confusión de los miedos antiguos mantiene en vilo a los cadáveres
prematuros y los árboles como manos crispadas salen de la tierra
para alcanzar el cielo, los sueños llenos de telarañas,
pero
la boca de los mortales sólo ansía el beso que descifre su secreto.
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